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Esto lo escribí para una amiga de la infancia y quiero compartirlo con todos:
Cuando el prejuicio no deja espacio para las ideas, sólo queda lo que ha sido el caldo de cultivo para la emergencia del Fascismo: la irracionalidad.
La cultura de la violencia comienza con la descalificación del otro y la falsificación de la verdad, ambas cosas se están produciendo en la oposición venezolana.
Como en el pasado, gente cultua se hace militante de la causa de los fascistas, en la medida que sus miedos, fundados en los prejuicios que han sembrado los agentes del gran capital, se hacen más profundos y dan base para aceptar acciones que antes les eran política y éticamente imposibles de aceptar. Es así que se acepta la violencia y la cultura de la muerte que caracteriza a la política fascista.
Si perdemos el sentido humano, que es lo que el fascismo genera, nos "bestialisamos".
No nos hagamos eco de esos valores y conservamos el espíritu de la convivencia, de la tolerancia, en otras palabras sigamos siendo humanos, para poder enfrentar la barbarie en la que unos pocos burgueses asustado quieren involucrarnos.
La democracia tiene reglas que las aceptamos o las combatimos, pero sino se respeta la decisión de la mayoría, entonces no estamos dentro del juego democrático.
Cuando decidimos en un momento de nuestras vidas combatir al Estado Burgués que impuso el puntofijismo, lo hicimos en todos los planos desde el político hasta el militar y asumimos las consecuencia de nuestros actos, sabíamos que el combate era desigual pero justo, luchábamos por cosas que hoy están haciéndose realidad. En ese momento luchamos fuera de la legalidad burguesa, eramos expresión de la subversión y sujetos a la represión del aparato Estatal, sabíamos que nuestros actos tenían consecuencias en nuestras vidas, que podían se mortales, pero decidimos jugarnos la vida por lo que creíamos.
Con el adversario no nos ensañabamos, como él con nosotros, hemos perdido la cuanta de los asesinados, desaparecidos y torturados de los 40 años de "democracia burguesa militarizada", que impuso el pacto de puntofijo, ya no existen estudiantes muertos en manifestaciones, en la década del 80 al menos 1 cada semana, no existen presos políticos, pero si políticos presos por delitos que están tipificados en las leyes venezolanas. Nosotros, los que sufrimos la cárcel, la persecución y la tortura podemos dar cuenta de eso.
Que hay fallas, que hay vicios de los cuales no hemos podido deslastrarnos todavía, es cierto, pero también tenemos muchos avances, muchos derechos fueron restituido, y se obtuvieron otros que el pueblo desarrolla actualmente.
Por último, y por que nos une el afecto quiero decirte que no nos hagamos eco de esa agenda de odio, que nos quieren imponer.
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